domingo, 8 de noviembre de 2009

Ruzante

Angelo Beolco, Il Ruzante



Angelo Beolco nació en Padua cerca de 1502 (aunque no se sabe con certeza). Se presume que es hijo natural del Doctor Giovani Beolco con una criada. A la muerte de su padre se dedicó a administrar sus tierras, las tierras de sus familiares y también las tierras de Alvise Cornaro, un noble quien se convirtió en su protector.

Pero Angelo Beolco no era un simple hombre de campo, era un amante del teatro que al parecer recibió una buena educación (por las muchas referencias en su obra al “teatro culto”). Actor, director y dramaturgo es considerado el antecedente más importante de la Commedia dell’Arte.




Empezó su carrera en el teatro en 1520 y a partir de ese punto sus obras, escritas en el dialecto veneciano, siempre se representaron en cortes ante grandes hombres del clero y la nobleza italiana. Beolco fue mejor conocido por su personaje de Ruzante, un campesino. Y como casi todos los grandes actores de commedia, hay dificultades para separar al actor de su personaje - Como los Andreini y Martinelli – porque la línea que los divide es muy ténue. Murió en 1542.

Algunas de sus obras son: “La pastoral”, “La Betia”, “Bilora”, “Dialoghi”, “El Parlamento de Ruzante, De regreso al campo”, “La Moscheta”, “La Fiorina”, “La Piovana”, “La Vaccaria” y la “Aconitana”, entre otras.




Sus obras escritas en dialecto son de difícil acceso al común de los estudiosos del teatro de habla hispana. Inclusive se cree que sus obras no están escritas del todo en el dialecto veneciano, sino que hay partes escritas en una forma de lenguaje que el propio Beolco inventó para sus obras.

Ruzante es para la Commedia su antecedente más inmediato y más importante. Hay muchas cosas que lo ligan a ella. En primer lugar la especialización que los actores profesionales lograban con un solo personaje, que trascendía los límites de una sola obra y a veces los límites de la ficción. El hecho de que sus comedias estaban escritas en el dialecto local de los personajes que interpretaba (por cada personaje de la Commedia hay un dialecto del italiano representando a la región de donde proviene el personaje y su condición social). Y la más importante característica del teatro de Ruzante que comparte con la Commedia: la combinación de elementos del teatro culto y erudito con el teatro popular.




Los elementos populares de sus dramas saltan a la vista y forman parte del largo proceso de profesionalización que los actores italianos iniciaron a finales de la edad media y que llegaron hasta la consolidación de las grandes compañías de comediantes del arte como los “Gelosi” y los “Confidenti”. Pero también Beolco hacía uso de argumentos extraídos del teatro clásico y erudito, del gusto por lo pastoril (tan de moda en el ambiente cortesano) y de la cercanía con el mundo intelectual y académico. Algunos consideran que la Commedia es sólo una parodia del teatro culto, que tomaban los argumentos del teatro erudito y los parodiaban sin otra pretensión que hacer mofa de ellos, pero no creo que esto sea correcto. Más bien se trata de una estilización, de un proceso que toma lo mejor de la literatura y lo incorpora a espectáculos populares que enriquecen los argumentos con su aparato representacional lleno de recursos y riqueza interpretativa. En la primera obra de Ruzante vemos ya un indicio de esta mezcla de estilos. En la “Pastoral”, el tema y argumento están íntimamente relacionados con el teatro pastoril tipo “Arcadia”, erudito y lleno de reglas. Pero en Ruzante el elevado tema pastoril es constantemente atacado por las irrupciones de una comicidad desparpajada. El actor prevalecerá por encima de la literatura, del texto, ya que el texto se convierte no en una barrera que delimita la interpretación, sino en un instrumento para potencializarla.

En el teatro culto, amante de lo griego y latino, el actor está al servicio del texto. Pero en el teatro de Ruzante ya se veía un cambio de actitud (que sería la marca definitiva de los comediantes del arte): el texto está al servició del actor y no puede ser de otra manera. De esta forma la literatura dramática se convierte en sólo una más de las herramientas del actor. Aunque Ruzante no llega muy lejos, quizá no sea un esclavo del texto pero sigue siendo un dramaturgo. Sus obras siguen teniendo un texto y no se deja nada al improvizzo.

Hay algo en Ruzante (el personaje) que nos recuerda a todos los zanni, es bribón, un hombre de la clase baja cuyo apetito nunca se acaba (y no estoy hablando de un apetito espiritual sino del hambre acumulada por años de mal comer), un simple, campesino ingenuo e ignorante que pocas veces es mal intencionado.

A la muerte de Ruzante sobrevino la explosión de comediantes del arte y sus compañías que empezaron a surgir aquí y allá, en toda Italia, más o menos en la década de 1540. El teatro de Beolco tal vez no sea Commedia dell’Arte, pero se encuentra relacionado íntimamente con ella, la inspira, la precede y la anuncia.


Esta página está especializada en Ruzante, vale la pena que la visiten:

http://www.ruzante.it

1 comentario:

Jirafas y Cachalotes dijo...

Muy interesante tu blog, aun no he tenido oportunidad de leer todo...
saludos desde Monterrey