viernes, 28 de agosto de 2009

Tristano Martinelli:El Arlequín


Tristano Martinelli


En su libro “The History of Harlequinade” (que es básicamente una traducción del libro: “Masques et bouffons”), Maurice Sand nos cuenta que tanto Brighella como Arlequín son originarios de Bérgamo. La ciudad tiene dos secciones: Bérgamo alto y Bérgamo bajo. Brighella es de Bérgamo alto y como todos sus habitantes, es astuto, vivaz, de una inteligencia privilegiada; aunque algo violento y malicioso. Pero Arlequín, es de Bérgamo bajo, y por ello es un poco estúpido, algo lento, ignorante, poco dotado; pero nunca mal intencionado.




Hay muchas cosas que se dicen sobre Arlequín, es sin dudarlo el personaje más popular de la Commedia. Hay libros enteros que hablan sobre Arlequín. En mi opinión personal, de las Máscaras (hay dos clases de personajes en la Commedia, las Máscaras y las Personas. Las Máscaras se dividen también en dos clases: los Zanni y los Magníficos) es uno de los personajes imprescindibles, junto con Pantalone; y podemos rastrear sus inicios hasta las Farsas Atelanas. El Maccus y el Pappus, Pantalone y Arlequín, son arquetipos cómicos de gran importancia.



Hubo un Arlequín que en la historia de teatro se coloca por encima de todos los demás. Algunos autores dicen que de hecho fue el primer Arlequín: Tristano Martinelli. En su libro “Performance and literature in the Commedia dell'Arte”, Robert Henke dice de Martinelli:


“Entre 1584 y 1621, el más visible, con mayor influencia y el que más representa la antigua tradición bufonesca fue el actor de Mantua Tristano Martinelli, el primer arlequín.”

Robert Henke





Afirma que Arlequín, como personaje, tiene orígenes tanto franceses como italianos ya que fue hasta la estadía de Martinelli en París que el personaje tomó forma. Martinelli publicó un libro: “Composición Retórica”, en la más pura tradición de los grandes actores de Commedia al publicar sus Canovaccio (lo mismo hizo Isabella Andreini). Martinelli tuvo tanta influencia en la época que podía darse el lujo de llamar a los reyes de Francia: “Compadre Gallo y comadre Gallina” (por Gallo – Galo).

En un primer momento Martinelli se consiguió la protección del duque de Mantua, Vincenzo Gonzaga. Hacia 1585 se trasladó a Francia y comenzó a usar su personaje de Arlequín. Se cuenta que Martinelli sufría una condición médica que afectaba sus cuerdas vocales y su voz era muy aguda, rasgo que Arlequín tomó de Martinelli y se perpetuó en la característica voz chillona del personaje (por supuesto que no hay fuentes serias que confirmen el hecho, así que debe tratarse sólo de una especulación). Sea que Arlequín ya existiera en los tiempos de Martinelli, o que de hecho Martinelli fuera el primer Arlequín, aglutinando toda la tradición bufonesca y creando un personaje parecido al Maccus (la protuberancia en la frente de la máscara de Arlequín es exactamente igual a las protuberancias que las máscaras y figuras de terracota del Maccus tienen) al absorber las características de algunos otros Zanni que no sobrevivieron al paso del tiempo, lo que es un hecho es que Arlequín tomó relevancia hasta Martinelli y no antes de ello.

Cuando hablamos de la cualidad bufonesca de Arlequín no exageramos. Martinelli era capaz de presentarse en las cortes más importantes de Italia y Francia y permitirse hacer chistes a expensas de sus poderosos mecenas (como un bufón de corte). Claro que Martinelli siempre se hizo acompañar de una compañía de comediantes italianos, entrenados para hacerlo resaltar. Hacia 1600 logró ser el cómico más importante de la corte del rey francés Enrique IV. Murió en 1630.

Hay mucho de la personalidad de Martinelli en Arlequín, pero el proceso es inverso. Tanto que hacia el final, ya no pueden separarse las dos personas, Martinelli es Arlequín y Arlequín es Martinelli. Esto no es raro. Pensemos en grandes cómicos, especializados en un solo personaje (eso es la más pura tradición de la Commedia viva en nuestros tiempos): Chaplin y su vagabundo, el Gordo y el Flaco, los hermanos Marx, Cantinflas. Habrá mucha dificultad en separar a las personas reales de sus personajes sobre todo si dedicaron la vida entera a ellos.

Hay otra característica de Arlequín que le debe a Martinelli, sus cualidades acrobáticas. Se dice que la capacidad acrobática de Martinelli era asombrosa, sus músculos eran capaces de hacerlo volar por los aires sin esfuerzo y realizar toda suerte de trucos peligrosos y maravillosas muestras de virtuosismo corporal.

2 comentarios:

Rodrigo_Alonso dijo...

genial gracias.. muy interesante como artista me vale demasiado esta informacion...atte rodrigo

Huemacnuel dijo...

Para servirte... al contrario, gracias por interesarte en este blog.